Implementar de manera constante y regular un adecuado plan de inspección de extintores es fundamental para prevenir accidentes graves y proteger la vida de los trabajadores.
Aunque suelen pasar inadvertidos para la gran mayoría de las personas, los extintores portátiles constituyen la primera línea de defensa contra incendios en empresas y oficinas. Por ello, y al igual que todo equipo de seguridad, deben estar siempre operativos.
Esta condición sólo puede garantizarse, si el personal a cargo de su mantenimiento cuenta con adecuados protocolos de inspección, revisión y prueba.
¿Por qué implementar una correcta inspección de extintores?
La inspección regular de los extintores es esencial en todo programa de seguridad, e incluye tanto las tareas de mantenimiento como las pruebas de su capacidad operativa. Dicha tarea puede estar a cargo de un tercero especializado externo, o bien, del equipo de seguridad de la propia empresa.
Esta importancia nace de la certeza de que más del 90% de los incendios en propiedades comerciales, pueden extinguirse rápidamente, si el mismo personal de la compañía lo enfrenta de inmediato mediante los extintores portátiles.
Por ello, si existe un solo extintor defectuoso, se pone en riesgo tanto la infraestructura y los equipos de la compañía, como las vidas de su personal.
En razón de ello, es fundamental que el equipo encargado, así como los supervisores de higiene y seguridad, sepan realizar esta inspección de manera eficiente y efectiva. Dicho objetivo implica estar al tanto de los problemas más comunes que pueden identificarse durante una inspección y, al mismo tiempo, saber cómo resolverlos.
Frecuencia de las inspecciones de extintores
Como regla general, los extintores de incendios deben revisarse durante la primera instalación y, a partir de entonces, con periodicidad mensual. Adicionalmente, esta frecuencia puede ajustarse de acuerdo con las necesidades de cada empresa, incluyendo las características del entorno físico, o la naturaleza de las actividades realizadas.
Por ejemplo, una oficina de servicios administrativos, o una agencia de publicidad, podría requerir menores exigencias que fábrica de alimentos, o una industria manufacturera pesada.
Esto implica que se deben realizar inspecciones mucho más frecuentes, si el área donde se almacenan los extintores representa riesgo de daños en sus componentes. Esto puede deberse a múltiples factores como la presencia de ácidos, óxidos, elementos corrosivos o factores ambientales que aceleren la degradación de los metales, entre otras posibilidades.
¿Cómo realizar una inspección de extintores rápida y efectiva?
Todo proceso de inspección mensual de extintores, deben seguir los siguientes pasos clave.
Verificar la accesibilidad
En primer lugar, hay que verificar si el extintor de incendios es fácilmente visible por todo el personal cercano, y comprobar que el acceso a él no esté bloqueado por ningún otro equipo u objeto. Este aspecto es crucial para responder rápidamente ante una emergencia.
Asimismo, si los extintores no son de ruedas, deben asegurarse en un lugar específico (por ejemplo, dentro de un gabinete de vidrio sin llave, o al interior de una caja de madera), para evitar que se muevan, caigan o pierdan.
Examinar el estado físico
Se debe verificar en detalle el etiquetado, estado general y posibles defectos físicos del extintor, siguiendo la siguiente pauta:
- Buscar el número de serie y comprobar si la etiqueta del extintor es legible.
- Comprobar si el cilindro y otras partes metálicas externas están libres de corrosión, abolladuras u otros signos de daño.
- Verificar que la conexión entre manguera y cilindro sea segura.
- Inspeccionar la presencia de grietas en la manguera, o de fugas en la boquilla.
- Comprobar si el pasador de bloqueo atraviesa los orificios de la palanca de descarga y la manija, y verificar si el pasador está bien asegurado por el sello. Hay que recordar que este pasador bloquea la palanca de descarga, y evita descargas accidentales.
Revisar el estado del manómetro
Se debe examinar la posición de la aguja de calibre. Si está dentro de la zona verde todo está correcto. Si, por el contrario, se ubica en la zona roja izquierda, significa que el extintor está subcargado y necesita una recarga. A su vez, si la aguja está en la zona roja derecha, indica peligro de sobrecarga.
Observar la etiqueta de inspección
Si el equipo cuenta con una etiqueta de inspección. Esta siempre debe indicar la presencia de otras inspecciones regulares. Si no es así, entonces es conveniente cambiar el equipo.
Generar informes y recomendar planes de acción
Una vez terminada la inspección, hay que resumir las observaciones y el eventual plan de acción. Además, se debe firmar la etiqueta de inspección del extintor indicando nombre del encargado, firma y fecha de inspección.
Es importante archivar que esta guía de inspección en una zona accesible a todos los colaboradores de la organización, de modo que sea más fácil recordar los pasos a seguir cada vez que se realiza una nueva verificación del estado del equipo.
¿Cómo actuar ante fallas o desperfecto?
Si bien es importante practicar en forma regular una inspección adecuada y minuciosa, también lo es conocer los problemas más comunes que se identifican durante este proceso, y cómo solucionarlos.
Algunas de estas contingencias, y sus respectivas soluciones, son los siguientes:
“La ubicación del extintor de incendios está obstruida”
Problema: Hay que prestar atención a los casos en que un extintor portátil esté “escondido” detrás o debajo de muebles, equipos de oficina, puertas, escritorios o fregaderos.
Acción: Deben eliminarse inmediatamente las obstrucciones, o reubicar el extintor donde todos puedan verlo fácilmente. Puede ser a lo largo de un pasillo, o cerca de una entrada/salida. También hay que preocuparse de instalarlo cerca de una señalización clara y precisa.
“Cilindro con abolladuras y/o óxido”
Problema: Como los extintores de incendios no se utilizan a menudo, pueden deteriorarse debido al ambiente húmedo o corrosivo, las transferencias constantes, o los golpes accidentales. Estos defectos físicos pueden provocar averías e, incluso, explosiones.
Acción: Se debe enviar inmediatamente el cilindro al fabricante para que lo reemplace.
Extintor sobrecargado o subcargado
Problema: Si el extintor tiene buena carga, dispondrá de la velocidad suficiente para controlar un principio de incendio. Por el contrario, un cilindro con poca carga será incapaz de extinguir el fuego. A su vez, si está sobrecargado tendrá fugas o, incluso, puede explotar, hiriendo a quien lo manipule.
Acción: Hay que enviar inmediatamente el cilindro al fabricante para su reemplazo o recarga, según corresponda.
“Falta el pasador de bloqueo o el sello está roto”
Problema: Los pasadores de bloqueo y los sellos son metal o plástico, y pueden desaparecer después de un ejercicio de entrenamiento, un proceso de limpieza, o alguna manipulación inesperada. Ambos componentes siempre deben ir juntos, ya que evitan que se presione accidentalmente la palanca, y se libere el contenido del extintor.
Acción: Si falta alguna de estas piezas, se debe obtener inmediatamente un repuesto. Si no está disponible, concurra a la ferretería más cercana para realizar un reemplazo temporal, hasta conseguir la refacción definitiva con el fabricante.
“Extintor muy cerca del suelo”
Problema: Un extintor depositado directamente en el piso puede ser golpeado accidentalmente por quienes transitan en el lugar de trabajo. Esto puede causar más abolladuras en el cilindro. Tampoco hay que olvidar que la temperatura variable del piso puede causar cambios inesperados en la presión del extintor.
Acción: La práctica estándar es montarlo en una pared, mediante soportes metálicos, a una altura de entre 1,00 a 1,50 metros del suelo. Alternativamente, se pueden usar soportes de madera o acero.
El aporte de la tecnología
Personal de seguridad bien entrenado, puede inspeccionar hasta 100 extintores al mes en una empresa u oficina. Sin embargo, esto también implica redactar gran cantidad de informes posteriores a la inspección.
Todo ese papeleo incrementa exponencialmente la probabilidad de error humano, lo que, a su vez, se traduce en mayor riesgo de que uno más extintores no funcionen de manera adecuada cuando se los necesite.
Este riesgo puede eliminarse mediante soluciones tecnológicas o aplicaciones tipo checklist. Con su ayuda, los supervisores y encargados de seguridad podrán realizar inspecciones de manera más eficiente. Esto mejorará, sin lugar a dudas, la posibilidad de combatir exitosamente un incendio en el lugar de trabajo.
Este apoyo tecnológico permite:
- Realizar inspecciones eficientes mediante un dispositivo móvil, sin utilizar papel.
- Adjuntar registros fotográficos a los informes de inspección, de manera rápida y sencilla.
- Escalar ágilmente los problemas detectados, y asignar las respectivas acciones correctivas, incluso antes de finalizar el propio proceso de inspección.
- Generar informes visuales completos y compartirlos en tiempo real con otros usuarios o supervisores. – Guardar los datos en la nube, y mantener seguros todos los informes previos y las plantillas de inspección históricas.
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