Los Decretos Supremos son instrumentos legales, cuyo cumplimiento es obligatorio para todas las empresas que desarrollan sus actividades en Chile.
Estos Decretos, constituyen una guía imprescindible para implementar planes que protejan en forma efectiva y eficiente la salud y seguridad de los trabajadores.
Este objetivo es fundamental, pues según estadísticas de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), cada año se producen más de 370 millones de accidentes laborales en todo el mundo.
Un registro que, a su vez, se traduce en la alarmante cifra de 2,78 millones de muertes anuales. Causadas, en su mayoría, por errores o fallas que pudieron evitarse, si se hubiera implementado correctamente un plan de Seguridad y Salud en el Trabajo (SST).
En consecuencia, las empresas no pueden eludir la responsabilidad que les compete dentro de este complejo escenario.
Diseñar y aplicar estrictos planes de SST, no solo resguardará la salud de los colaboradores, sino que también evitará sanciones o multas que se aplican a quienes incumplen la normativa.
¿Qué es un Decreto Supremo?
Un Decreto adquiere la característica de “Supremo” cuando:
- Lo emite el Presidente de la República, a través de un Ministerio de Estado.
- Cuenta con la firma del respectivo ministro para su promulgación.
El alcance de un Decreto Supremo puede ser particular o general. En este último caso adopta el nombre específico de Reglamento o Decreto Reglamentario.
¿Cuántos Decretos Supremos están vigentes en Chile?
El marco jurídico institucional vigente en Chile incluye cerca de 380.000 normas, derivadas directamente del orden general instaurado por la Constitución Política de la República.
Esto permite trasladar los principios generales establecidos en la Carta Magna, a reglamentos específicos concretos.
Uno de estos instrumentos legales específicos (entre los que se cuentan además leyes, códigos y resoluciones, entre otros) es el decreto supremo, cuyo aporte es primordial para que las empresas cuenten con un marco específico de acción.
¿Cuáles DS están orientados específicamente a la Seguridad Laboral en Chile?
La legislación chilena dispone actualmente de una amplia gama de decretos supremos vigentes, dedicados específicamente a regular los distintos ámbitos de la Seguridad y Salud en el Trabajo.
El cumplimiento de estos decretos es obligatorio para todas las empresas que operan en territorio nacional. Sin importar su tamaño, segmento de operaciones o ubicación geográfica.
Las compañías que no respeten estos decretos se exponen a severas multas y penalizaciones.
De hecho, cuando se registran incidencias reiteradas, la autoridad competente puede decretar el cierre temporal o definitivo de la empresa infractora.
Los Decretos Supremos más importantes, dentro del ámbito de Seguridad y Salud en el Trabajo, son los siguientes:
Decreto Supremo No.101/1968 del ministerio del Trabajo y Previsión Social
Es el que aprueba el reglamento para aplicar la Ley Nº 16.744, que establece las normas sobre accidentes del trabajo y las enfermedades profesionales. Este Decreto fue modificado el 05/02/2010.
Decreto Supremo No.109/1968 del ministerio del Trabajo y Previsión Social
Es el que aprueba el reglamento para calificar y evaluar los accidentes del trabajo y las enfermedades profesionales.
Está regulado por lo dispuesto en la ley 16.744, de 1° de febrero de 1968, que estableció el seguro social contra los riesgos por estos accidentes y enfermedades. Este decreto fue modificado el 07/03/2006.
Decreto Supremo No.285/1969 del ministerio del Trabajo y Previsión Social
Este Decreto, aprueba el Estatuto Orgánico para la formación de Mutualidades de empleadores. El DS fue modificado el 14/07/1989.
Decreto Supremo No.40/1969 del ministerio del Trabajo y Previsión Social
Es el DS que aprueba el reglamento sobre prevención de riesgos profesionales y fue modificado el 16/09/1995.
Decreto Supremo No.54/1969 del ministerio del Trabajo y Previsión Social
Este Decreto Supremo aprueba el Reglamento para la Constitución y Funcionamiento de los Comités Paritarios de Higiene y Seguridad. Fue modificado el 05/02/2010.
Decreto Supremo No.313/1973 del ministerio del Trabajo y Previsión Social
Es el que incluye a los estudiantes de escuelas primarias y secundarias en la cobertura del seguro de accidentes, de acuerdo con la Ley N°16.744. Fue modificado el 24/09/1985.
Decreto Supremo No.594/2000 del Ministerio de Salud
Este Decreto, aprueba el Reglamento sobre las condiciones sanitarias y ambientales básicas que deben estar presentes en los lugares de trabajo. Fue modificado el 20/06/2019.
Decreto Supremo No.76/2007 del ministerio del Trabajo y Previsión Social
Es un Decreto Supremo que aprueba el reglamento para la aplicación del artículo 66 Bis de la Ley N°16.744, sobre la gestión de Seguridad y Salud en el Trabajo en obras, faenas o servicios que indica. Fue modificado el 18/01/2007.
Decreto Supremo No.67/2009 del ministerio del Trabajo y Previsión Social
Es el decreto que reglamenta la incorporación de los trabajadores independientes al seguro social contra riesgos de accidentes del trabajo y enfermedades profesionales indicados en la Ley N°16.744. Fue modificado el 11/05/2019.
Decreto No.44/2018, del Ministerio de Economía, Fomento y Turismo
Es el que aprueba el reglamento que establece requisitos de seguridad y rotulación de extintores portátiles.
Decreto Supremo No.18/2020, del Ministerio del Trabajo y Previsión Social
Es el que aprueba el Reglamento del artículo 152 Quáter M del Código del Trabajo. Este Reglamento establece las condiciones específicas de Seguridad y Salud en el Trabajo que deben tener quienes prestan servicios en las modalidades de trabajo a distancia o teletrabajo, de acuerdo con los principios y condiciones de la Ley N° 16.744.
¿Cómo la tecnología facilita el cumplimiento de los Decretos Supremos?
Tal como hemos visto, cumplir las obligaciones establecidas en cada uno de estos Decretos Supremos representa una tarea ineludible para todas las organizaciones.
Y asegurar el cumplimiento de cada decreto requiere de inspecciones, supervisiones, correcciones y capacitaciones periódicas.
Esto se traduce en la obligación de trabajar con grandes volúmenes de datos. Tarea que implica recolectar, administrar y analizar constantemente información para tomar decisiones estratégicas.
En este contexto, contar con el apoyo de herramientas tecnológicas permite digitalizar y automatizar todas las tareas asociadas a la supervisión.
Solo de este modo se implementará un proceso eficiente, que ayude a eliminar el riesgo de fallas o errores humanos. Una contingencia especialmente recurrente cuando se utilizan sistemas basados en papel y formularios impresos.