El mantenimiento está vinculado a fallas o defectos, ya sea para corregirlos o evitar que ocurra uno. Esta actividad se desarrolla en productos, servicios y activos para garantizar la calidad en varios sectores como la industria, las telecomunicaciones, la refrigeración y la climatización.
La importancia de este proceso está íntimamente ligada a los costos de una operación. Y, ¿sabía que un poco de mantenimiento puede ahorrarle dinero al final del mes? En algunos casos, invertir en mantenimiento preventivo puede ser una fuente de enormes ahorros; En otros, las medidas correctoras compensan más que las preventivas, pensando desde un punto de vista económico.
Pero, ¿cómo saber cuáles son los mejores para su segmento?
Mantenimiento correctivo
Después de la falla percibida en la operación, es necesario corregir este problema. Esta acción correctiva puede ser planificada o de emergencia, también llamada no planificada. Para simplificar los detalles de este tipo, tenemos:
Mantenimiento correctivo planificado: es un plan de acción de una inspección previa, generalmente predictivo. Después de detectar el problema, se programa una corrección.
Mantenimiento correctivo no planificado: uno de los más costosos, trabaja para resolver una emergencia detectada durante la operación.
También se pueden dividir en la forma en que se ofrecen las reparaciones. Los remedios paliativos son aquellas correcciones que solo se producen para que el activo siga funcionando hasta que tenga uno definitivo.
Mantención preventiva
También llamado programado o programado, el objetivo principal de este tipo de mantenimiento es reducir la probabilidad de fallas de equipos o activos. Las empresas generalmente previenen, de diferentes maneras, las posibilidades de tener problemas y programan visitas de inspección para evitarlos.
La forma en que decida hacer este trabajo depende del activo en el que esté trabajando y del período de tiempo estipulado. Se pueden dividir de la siguiente manera:
Mantenimiento preventivo sistemático: sigue la ley de degradación, es decir, un período conocido para que el objeto se desgaste y pueda fallar. En este caso, las visitas se programan antes de este plazo.
Mantenimiento Preventivo Periódico: se realiza según un cronograma combinado entre la empresa proveedora y el cliente, pero no toma en cuenta exactamente una fecha de degradación.
Hay otros tipos que tienen la misma esencia de un preventivo porque valoran la verificación antes que los fallos, como el predictivo y el detective. Pero, como tiene mayores especificidades, algunos autores lo consideran algo diferente y no solo una variación.
Mantenimiento predictivo
También conocido como “condicionado”, “no sistemático” o “preventivo por estado”, prevé fallas o paradas en la rutina de parada por cuenta del activo con una metodología diferente.
La base principal del mantenimiento predictivo es el sistema operativo. Con base en la operación y monitoreo del sistema dado, es posible comprender alguna modificación en su operación y evitar que se convierta en una falla o problema.
Mantenimiento detective
La búsqueda de fallas con mantenimiento detective requiere el uso de dispositivos adecuados ya que su principio es identificar eventos que no se encontraron durante la operación.
Enfocada a los sistemas de control, mando y protección, la verificación se realiza en periodos estipulados para evitar o corregir averías ocultas.
Mantenimiento productivo total (TPM)
Este tipo de mantenimiento se conoce como TPM debido a su nombre en inglés, Total Productive Maintenance. Su principio es bastante interesante y considera que el rol de buscar la eficiencia en el mantenimiento no es solo el rol de un equipo específico.
Por tanto, el Mantenimiento Productivo Total considera maximizar la eficiencia productiva, involucrando a toda la empresa. La idea principal es que todos contribuyan para que los activos y equipos funcionen de la mejor manera, garantizando la calidad de la prestación de un servicio externo o interno.
Y en su empresa, ¿qué tipos de mantenimiento se realizan? ¡Cuéntanos dejando tu comentario!
